La bursitis del tendón de Aquiles

definición

En medicina, la bursitis de las subactilas es la inflamación de una bursa debajo del tendón de Aquiles (subaquilas). La bursa llena de líquido se usa para reducir el roce y las fuerzas de presión sobre los tendones, huesos y articulaciones. Como resultado del estrés inadecuado constante, puede ocurrir inflamación, que puede ser aguda o crónica.

Las razones

Las causas son variadas. Además del estrés prolongado incorrecto o excesivo, el uso de calzado inadecuado (zapatos demasiado ajustados en la zona del tendón de Aquiles y el talón), posiciones incorrectas en la zona del pie y el tobillo (p. Ej., Arcos, arcos, etc.), así como un aumento demasiado rápido de los volúmenes de entrenamiento de los deportistas. bursitis de subachillae.

La aparición del llamado espolón calcáneo también se cuenta entre las causas. Es una protuberancia ósea en forma de espolón, en su mayoría puntiaguda, en el área del talón o el calcáneo. Las consecuencias son una irritación constante y un aumento de la presión en esta zona. En casos raros, la inflamación bacteriana también puede provocar la enfermedad.

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Los síntomas acompañantes

El síntoma principal principal de la enfermedad es el dolor que ocurre en reposo y bajo estrés. Al mismo tiempo, se produce hinchazón, enrojecimiento y calentamiento, así como engrosamiento del tendón afectado, debido al aumento de la formación de líquido. Además, pueden ser posibles restricciones de movimiento en el tobillo y el pie.

Descubra todo sobre el tema aquí: Bursitis.

El diagnostico

El diagnóstico se realiza, además de un examen físico detallado por parte del médico tratante, mediante un examen ecográfico. Esto permite mostrar muy bien la extensión de la inflamación y cualquier daño existente en el tendón de Aquiles.

Para poder evaluar con precisión la posición y la forma de un espolón de talón existente, se toma una imagen de rayos X del pie en dos planos de visión diferentes. En algunos casos, también es necesaria una MRI (tomografía por resonancia magnética) para un diagnóstico preciso.

El tratamiento

El tratamiento depende del alcance y la gravedad de la enfermedad. Se puede realizar de forma conservadora o quirúrgica. No obstante, las terapias conservadoras deben usarse primero antes de considerar la extirpación quirúrgica de la bursa (bursectomía).

Básicamente, se debe reducir la carga sobre el pie y el tendón de Aquiles y se debe tomar un descanso en los deportes. El alivio del dolor se proporciona tomando analgésicos, medicamentos antiinflamatorios como Diclofenac. Se pueden realizar ejercicios fisioterapéuticos, aplicaciones de calor o frío al mismo tiempo.
Si la causa es una desalineación del pie, el método de elección son las plantillas especiales fabricadas individualmente por un técnico ortopédico capacitado. La inyección de cortisona, generalmente junto con un anestésico, en el tejido inflamatorio también se usa hoy en día. Sin embargo, esto no debe hacerse más de 2 a 3 veces, ya que una duración más prolongada de la terapia daña los tendones y los tejidos circundantes.

Los apósitos en pomada también son un medio de terapia conservadora. Además de su efecto principalmente refrescante, tienen un efecto inhibidor sobre la inflamación y el dolor. Muchos pacientes han tenido buenas experiencias con el llamado "ungüento para caballos". Este ungüento en realidad proviene de la medicina veterinaria, pero debido a su función curativa y refrescante, también se puede usar para problemas del cuerpo humano.
La aplicación de férulas o incluso un yeso para inmovilizar la zona afectada sólo debe realizarse en casos muy graves. Este método conduce a una reducción significativa de la fuerza de los músculos y tendones, así como a una disminución de la interacción entre los distintos grupos de músculos.

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¿Cuándo necesito una operación?

Si las terapias conservadoras no brindan el éxito deseado, existe la posibilidad de extirpar quirúrgicamente la bolsa. En un procedimiento quirúrgico abierto, la bolsa se extrae a través de una incisión sobre el tejido inflamado.
Algunas clínicas también ofrecen este procedimiento de manera mínimamente invasiva con la ayuda de un endoscopio. Un endoscopio es un tubo estrecho a través del cual puede insertar una pequeña cámara e instrumentos de corte. Esto permite evaluar y operar el tendón de Aquiles y la bolsa. Las ventajas son una herida quirúrgica más pequeña, un menor riesgo de infección, menos dolor después de la operación y un tiempo de recuperación más corto.

Obtenga más información sobre el tema aquí: Cirugía de bursitis.

La duración

El tiempo que lleva recuperarse por completo depende de la gravedad de la progresión de la inflamación y de si otras estructuras se ven afectadas como resultado. Al mismo tiempo, el tiempo de recuperación varía según el tipo de terapia elegida (conservadora o quirúrgica). En circunstancias normales, los síntomas mejorarán significativamente después de unas pocas semanas si las razones de la enfermedad se identifican y tratan adecuadamente. Si este no es el caso, la inflamación también puede ser crónica, lo que solo puede remediarse mediante una intervención quirúrgica.

En principio, la enfermedad puede tratarse de forma relativamente fácil y completa si se detecta con la suficiente antelación. Como medida preventiva, debes asegurarte de que los tendones y músculos estén fortalecidos y debes evitar la presión constante sobre las estructuras mencionadas.

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